Matthews no puede creerse aún haber conseguido el amarillo
Michael Matthews se estrenaba ayer en el prólogo de la París-Niza donde consiguió la victoria derrotando al gran favorito; el ciclista del Giant-Alpecin, Tom Dumoulin. Este prólogo de la París-Niza constituían las primeras pedaleadas del australiano en esta temporada 2016.
Al termino de la jornada, Michael Matthews no podía creerse haber conseguido la victoria en el día de su debut este 2016. «Estoy un poco sorprendido porque esta era mi primera carrera de la temporada. Yo tenía grandes esperanzas pero no pensaba que podía ganar. Es un buen comienzo sin duda. Así que batir a alguien como Dumoulin, que es uno de los mejores especialistas contra el reloj en el mundo, es sin duda muy especial. Yo sabía que el entrenamiento había ido bastante bien, pero es difícil saber exactamente cuál es tu nivel en carrera»
El corredor de Orica tenía otro plan para conseguir el amarillo y no tan rápido como ha sido esta vez. «No era un gran objetivo en la París-Niza. Pensaba más en estar entre los cinco primeros en un recorrido como este que se me adaptaba y luego tratar de coger el amarillo en una de las próximas etapas. Obviamente, estoy feliz por haber sido capaz de llevarme la victoria», comunicaba el ganador del prologo de la París-Niza.
Con los pies en el suelo, Matthews espera poder mantener el maillot amarillo durante unos días: «Vamos a tomarlo día a día y ahora que tengo el maillot nos limitaremos a tratar de mantenerlo tanto tiempo como sea posible. Las próximas etapas son planas. Veremos hasta dónde puedo llegar. Mi forma en la subida es bastante buena, así que estará bien ver cuánto tiempo puedo mantenerlo. Es um maillot fantástico y una carrera increíble. Esta es la París-Niza y conozco la mayoría de los ascensos de esta semana».
