Amstel Gilbert Race, Flecha Valverdona
Como los Lakers la NBA, el Real Madrid la Champions, o Schumacher la Fórmula 1, en el ciclismo de hoy Philipe Gilbert y Alejandro Valverde se han convertido en los dos adalides de las Árdenas. Uno en «La carrera de la cerveza«; el otro, en el Muro de Huy.
Y es que el ciclismo de hoy en día nada tiene que ver con el de otra época. Nombres propios como Rik van Looy, Roger de Vlaeminck y Eddy Merckx consiguieron para su palmarés acumular montones, decenas, cientos de triunfos, incluyendo la gesta de ganar los Cinco Monumentos del ciclismo. Ciclismo de otrora, admirable por los escasos medios de por entonces, pero inconcebible hoy en día.
¿Qué gregarios había entonces? ¿Con quién tuvieron las luchas más encarnizadas? Por poner un ejemplo de los dos últimos citados: en diez años, ganaron siete París-Roubaix… además de otra buena batería de victorias. Sí, en los tiempos actuales Cancellara y Boonen obtuvieron seis Infiernos del Norte, pero ¿cómo? A base de picos de forma muy altos en esas fechas, y mucho más bajos después. A eso me refiero.
Catorce son las clásicas del tríptico ardenness que suman entre los dos.
No parecen ser casualidad las cinco Flechas para el de Murcia. Este año le faltó silbar encima de la bicicleta. Ni el ataque del prometedor Gaudu, ni el empuje final de Theuns sirvieron para impedir que sea el ciclista con más victorias en lo alto del Muro. Y, salvo nueva resurrección de Rebellin, seguiremos viéndolo en lo alto del palmarés.
Tampoco, que Gilbert haya llegado mejor que en los últimos años a la primavera. Ni que sea su cuarta Amstel, solo una menos que el mítico Jan Raas -otro ganalotodo de finales de los setenta y principios de los ochenta-. Ni, por supuesto, que el único maillot arcoiris conseguido por el valón haya sido en el Mundial de Holanda, bajando el Cauberg.
Ciclistas de hoy con palmarés de otra época.
