Ruanda, ¿y por que no?

El pasado domingo finalizaba el Tour de Ruanda celebrado en el centro de África y donde vencía el ciclista local Valens Ndayisenga seguido por los eritreos Metkel Eyob y Tesfom Okubamariam.
Se trata de una competición disputada a finales de noviembre y nacida en el año 2005. Aunque en sus comienzos fue una carrera amateur, en la actualidad y desde 2009 forma parte del UCI Africa Tour pero debido a la fecha la mayoría de ciclistas compiten bajo su selección puesto que en Europa ya ha finalizado la temporada.
Una vez vista toda lo que mueve la carrera africana nos lleva a la siguiente pregunta, ¿y por que no un mundial en Ruanda?. Si a esto le añadimos la pauperrima imagen vista durante los mundiales de Doha en Qatar donde el público se podía contar con los dedos de las manos y, me atrevo a decir, que aun nos sobrarían falanges cobra más fuerza la pregunta expuesta.
En un principio la respuesta parece bastante clara, por supuesto que se puede celebrar un mundial de ciclismo en el centro de África. Si Qatar puede, cualquier país del mundo puede celebrar un mundial puesto que nos encontramos en un mundo globalizado donde todos los países, supuestamente, estamos conectados y tenemos las mismas oportunidades. Pero en la realidad esto no es así, la globalización se olvida de algunos países como los africanos y nuestro deporte no se iba a mantener al margen. Sin entrar en la celebración de pruebas internacionales en países mas o menos lejanos a Europa, la pregunta es ¿que visibilidad tienen las pruebas de aquellos lugares?
Ahora, ¿que tiene Qatar que no tenga Ruanda? Parece fácil la respuesta, y más cuando habla alguien quien no ha estado muy de acuerdo con la designación de Doha como sede de las pruebas mundiales. Lo más probable que le falte a Ruanda es dinero. Así de triste es el mundo de hoy en día y nosotros mismos sabremos donde queremos llegar con esta supuesta globalización donde si no tienes dinero no cuentas. Esta idea me parece muy bien para los negocios pero, ¿queremos deporte o negocio?
Yo lo tengo muy claro, cuando me siento delante del televisor prefiero disfrutar del deporte donde el negocio influya levemente. Habrá quienes estén a favor del negocio para progresar y que las carreras solo queden en manos de quienes posean mayores capitales. Pero pensemos lo siguiente, cuando se hace esta afirmación lo hacemos, seguramente, desde una posición privilegiada contando con medios para ver las carreras y disfrutar de ellas en vivo.
¿Por que no disfrutar de la vida sin importar tu procedencia, religión, forma de pensar…? Cuando nacemos, morimos o realizamos las tareas más básicas todos somos iguales.