Parte médico de Chris Froome

El británico parece no haber sufrido ninguna lesión grave a pesar de la tremenda caída de este domingo
Un resbalón de Tony Martin a falta de 30 kilómetros para el final provocó una masiva caída del pelotón donde corredores como Geraint Thomas, Chris Froome, Romain Bardet o Richie Porte se iban al suelo. Todos parecían incorporarse al pelotón rápidamente salvo el jefe de filas de Sky.
Froome, magullado y con alguna herida visible, necesitaría la ayuda de sus compañeros para llegar a la cabeza de carrera y no perder tiempo en la meta. Además, dos cambios de bicicleta fueron necesarios para que el británico consiguiese salvar un día que se le acabó complicando.
La única duda y preocupación que existía era saber en que estado de salud había llegado Chris Froome, que solamente aceptó una pregunta por los periodistas mientras hacía rodillo. “No hay ningún problema de salud, un poco de piel y roces sin importancia. A nadie le gusta caerse y perseguir, pero no cedimos tiempo. Así funcionan las carreras“, explicaba el británico.
Pero no fue el único. Su director de equipo Nicolas Portal también quiso tranquilizar a sus seguidores. “No le pasa nada malo. Froomey sólo tiene golpes y heridas superficiales. Cambió de bicicleta dos veces, pero no entramos en pánico nunca”, terminaba.