Bauke Mollema: «Espero que mi año con Alberto Contador me ayude en el futuro»
El corredor de Trek centrará toda su temporada en la clasificación general del Tour de Francia
Acostumbrado a tener total libertad en el Tour de Francia desde que llegó a Trek – Segafredo, Bauke Mollema tuvo que ver como su rol de líder cambió al de gregario con la llegada de Alberto Contador al equipo norteamericano. El holandés, obediente siempre a las órdenes del equipo, asumió que en 2017 no podría estar en la Grande Boucle como jefe de filas y ayudó en todo lo que pudo a Contador en su objetivo de intentar llegar a París con el maillot amarillo. Aunque sin mucho éxito para Trek, el equipo norteamericano fue recompensado con una victoria en el Tour de Francia a manos de Bauke Mollema.
El holandés, echando la vista atrás a lo que fue 2017, reconoce que no fue un año perdido sino un aprendizaje el poder estar con uno de los mejores corredores de la historia del ciclismo. «Espero que el año pasado me ayude en el futuro. No fue malo ir al Giro y después hacer el Tour como gregario de Alberto. Ganar una etapa allí fue un gran éxito y también ver a Alberto intentarlo todo mientras le ayudaba me enseñó mucho», comentaba Mollema que no esconde sus objetivos para este 2018. «He de reconocer que estoy deseando volver al Tour. Creo que es la gran vuelta que mejor me va. Quiero que sea mi gran objetivo», explicaba en Cyclingnews.
Con un recorrido muy abierto, y con pocos kilómetros en la contrarreloj, Mollema ve la primera semana, especialmente el día de los adoquines, como un punto clave para mantener intactos los objetivos de luchar por la clasificación general. «La primera semana será realmente estresante y dura para el cuerpo. Creo que eso es bueno para mí. Será una primera semana fascinante, con algún favorito perdiendo tiempo. La etapa adoquinada es más difícil que en 2014, esta vez hay muchas más secciones«, comentaba.
En cuanto a la contrarreloj y a la montaña, el corredor de Trek reconoce que los puertos pueden ser más duros en la Vuelta y en el Giro, pero que la última semana del Tour las fuerzas escasean y eso a veces es más difícil. «Algunas de las subidas son más complicadas en el Giro y la Vuelta, pero en general todo el Tour es más difícil debido a los altos niveles de estrés«, terminaba.
