HISTORIA | Doblete de Induráin.
El genio español es el último corredor en conseguir dos Giros de Italia de forma consecutiva lo que le ha permitido entrar, este año, en el Hall of Fame del Giro.
Este año se cumplen 25 años del segundo Giro de Italia de Miguelón, pero empecemos por el primero.
Corría el año 1992 y, tras conseguir el ganar el Tour de Francia en el 91, Induráin seguía los consejos de su director Echevarri. De esta forma, Miguel tomaría la salida en el Giro en lugar de competir en la Vuelta a España.
Para llegar a la carrera italiana, Induráin brillo en la contrarreloj del Tour de Romandía para acabar segundo en la general.
Ya en tierras italianas, el navarro se hacía con el liderato en la segunda etapa. En aquel año, además de las 21 etapas, se disputó un prologo de ocho kilómetros en forma de contrarreloj individual.
Otra crono individual, en esta ocasión en la tercera etapa, sirvió para que Miguel Induráin afianzara su liderato. Alrededor de treinta segundos fue la renta obtenida frente al segundo de la etapa.
Al igual que el año pasado, el Giro finalizaba en Milán con una crono individual de 66Km siendo bastante favorable para el español.
Los directores del Banesto, aconsejaban a Miguelón ceder el rosa esperando, como hizo Dumoulin en 2017, a dar un golpe encima de la mesa en la última etapa.
Chiapucci y Chioccioli fueron quienes trataron de desbancar al Navarro en los Dolomitas pero no Miguelón resistía a quitarse el rosa.
Crono histórica la que realizo Miguel Induráin entre Vigevano y Milán. No solo ganó la etapa con 2 minutos y 46 segundos sobre el segundo del día. Además, doblo al segundo de la general para ganar la clasificación general con una ventaja de cinco minutos y doce segundos.
No solo ganó la etapa con 2 minutos y 46 segundos sobre el segundo del día. Además, doblo al segundo de la general para ganar la clasificación general con una ventaja de cinco minutos y doce segundos.
Se convertía en el primer español en ganar la ronda italiana, al igual que Dumoulin el año pasado siendo el primer holandés en ganar el Giro. Demasiadas coincidencias para dos corredores que se parecen tanto en su forma de correr.
Posteriormente, Miguel Induráin volvería al Tour de Francia para repetir victoria y plantarse en 1993 con dos Tours y un Giro en su palmarés.
Preparación muy parecida a la del 92 para afrontar este nuevo Giro con una etapa en la Vuelta a Murcia y un tercer puesto en la Vuelta a Valencia.
En esta ocasión, el español debió esperar hasta la crono de la décima etapa para poder enfundarse el maillot rosa.
Pero al día siguiente perdía el liderato y ya no lo pudo recuperar hasta la etapa decimocuarta. Etapa donde finalizo en segunda posición consiguiendo colocar una ventaja de 49 segundos con su más inmediato perseguidor. Ahora, ni esta diferencia ni el conseguir la victoria en la cronoescalada de Sestriere le iban a permitir vivir tranquilo. Una cronoescalada donde consiguió distanciar al segundo de la general hasta el minuto y 34 segundos.
Penúltima etapa del Giro de 1993 y el segundo quería la maglia rosa. El letón Piotr Ugriúmov, camino del Santuraio de Oropa, no paro de atacar a un Miguel Induráin que acabo cediendo alrededor de los 30 segundos en la línea de meta.
Finalmente, el navarro consiguió su segundo Giro de Italia gracias a ganar ambas cronos, igual que en el año anterior, pero en esta ocasión aún más. La diferencia fue de 58 segundos con su máximo perseguidor en una carrera donde, Miguelón, no llegaba al 100%.
