Rey de reyes

Alejandro Valverde ya es dueño y señor de la Flecha Valona. Atrás quedan los nombres de Eddy Merckx, Davide Rebellin, Marcel Kint y Moreno Argentin que hasta el día de hoy, como Alejandro Valverde, se encontraban en lo más alto del palmarés de la carrera belga. Hoy, han tenido que ver desde lejos como el murciano ha hecho de sus récords, una simple anécdota.

A cinco días de cumplir los 36 años, Valverde nos sigue demostrando que es eterno. Como el vino, cuanto más maduro mejor sabor. Muchos han sido los que han intentado en varias ocasiones derrocar a Alejandro de su trono. Todos ellos, han claudicado en el intento. Solamente les queda el consuelo de haber entrado en la historia como “aquellos valientes que desafiaron al rey de Valona”. Hoy no sería menos.

Desde el inicio del día, el pelotón sabía quién era el hombre a batir. Por eso los equipos mandaron a sus hombres formar la fuga. Tras varios intentos de escapada, finalmente fueron cuatro hombre, entre los que se encontraban Bono, Dillier, Van Der Sande y Cummings, quiénes formarían la fuga del día. Un movimiento valiente que hizo trabajar a Movistar y Etixx más de lo previsto. Y es que con Cummings escapado y tras sus exhibiciones en Tirreno – Adriático y Vuelta al País Vasco no es un corredor de fiar.

Mientras Movistar y Etixx unían fuerzas por reducir la ventaja, que en esos momentos rondaban los dos minutos, una caída de Haimar Zubeldia y Frank Schleck provocaba una fractura en la clavícula del luxemburgués y su posterior abandono. Por suerte el español salió ileso del accidente.

No fue hasta falta de 18 kilómetros cuando Cummings, último superviviente de la escapada, fuera neutralizado. Pelotón reagrupado y nervios a flor de piel. Con todos juntos de nuevo, sería Katusha que junto a Movistar impusiesen un ritmo infernal en los últimos kilómetros. No muy agusto con ello, Bob Jungel decidió tensar la cuerda, más si cabe, y demarraba al grupo principal. Izaguirre salía  a su rueda y se marchaban en solitario. Esta pareja obtenía unos segundos de ventaja que obligaban a Katusha aumentar más el ritmo.

A la desesperada, como hizo el año pasado, Wellens salía en busca de Jungel e Izaguirre. El belga con mucho pundonor consiguió alcanzar a este dueto, pero ya era demasiado tarde. El pelotón les alcanzaba a pocos metros de empezar la subida al muro de Huy.

La subida al muro de Huy fue muy explosiva. El pelotón se hacía mil pedazos a cada metro que se recorría, y Etixx con Daniel Martin y Julian Alaphilippe intentaron acabar con el dominio de Alejandro Valverde en esta prueba con un ataque bastante serio, pero el murciano no se aminoró y se zampó a los dos Etixx. El corredor de Movistar cruzaba la línea de meta con pasmosa tranquilidad que le permitieron disfrutar de un momento histórico como este. El Bala ha hecho historia, consiguiendo su cuarta Flecha Valona, la tercera consecutiva.

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Redacción Demarraje

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